Viena, la ciudad mejor valorada por sus visitantes el pasado Año Nuevo

La capital austríaca obtuvo un índice global Mabrian de 96,41, por delante de Praga y París

Los datos de satisfacción global recogidos por Mabrian durante las celebraciones del pasado año nuevo colocan Viena como la capital mejor valorada entre el 31 de diciembre de 2016 y el 1 de enero de 2017, con un índice de Percepción Turística Global (GTPi) de 96,41. La capital austríaca es, con Praga (90,11 puntos en el GTPi), un valor turístico de primer orden, tal y como refleja también el índice de Producto Turístico (TPi), que supera también los 96 puntos.

El producto cultural —con el afamado Concierto de Año Nuevo como reclamo central- encabeza el grueso de las menciones de sus visitantes, que le dan una valoración de 84,11 puntos. El producto cultural concentró también las menciones de los turistas que celebraron el Año nuevo en Praga, aunque su valoración fue, en este caso, fue bastante inferior: 65,14 puntos. La media de producto turístico de la capital de la República Checa fue en ese periodo de 78,01 puntos Mabrian. Su oferta de ocio nocturno, la segunda más mencionada, con 85,23 puntos, fue la mejor valorada.

Por detrás de Viena y Praga, el pasado Fin de Año, se situaron París (87,31), Barcelona (87,05) y Madrid (85,22). El producto cultural es también, en los tres casos, el más citado por sus visitantes, con más del 30% de las menciones. En el caso de París destacan los productos de ocio nocturno y gastronómico, así como la torre Eiffel como atractivo más mencionado por los turistas.

En lo que respecta a Madrid, los productos con más impacto por detrás del cultural se inscriben, por este orden, en los ámbitos del turismo familiar, el ocio nocturno y el turismo gastronómico, destaca notablemente el atractivo Puerta del Sol.

En cuanto a Barcelona, destaca el interés por parte de los turistas por el producto sol y playa pese a ser invierno, seguido por familiar, ocio nocturno y gastronómico superando todos ellos el 10% de las menciones,

 Los índices Mabrian procesan el Big Data turístico procedente de las principales plataformas de datos transaccionales, combinado con las opiniones emitidas por los turistas a través de las conversaciones generadas en las redes. Todo este caudal de información se filtra a través de un algoritmo propio basado en inteligencia artificial y procesamiento del lenguaje natural para obtener valores sólidos y fiables.